El héroe Kristhal Hernández 1º C

   Érase una vez en un pueblo de Alemania, un joven pequeño, sabio, humilde y fuerte. Este joven se llamaba Pomodoro.

   Pomodoro pasó una infancia muy triste porque su padrastro llamado Zacarías le maltrataba haciéndole hacer las labores del campo, la casa, el mercado y también el de su club de caza.

   Así fueron pasando los días, meses, años… hasta que Pomodoro fue a consultar al mago del pueblo su futuro; el mago, llamado Laurencio, le dijo su futuro pero también su pasado. Este pasado era incierto y liante pero aun así Pomodoro lo entendió; el mago le dijo:

   "Naciste un 15 de Enero de 1874, fuiste hijo de la mujer más guapa del todo el pueblo y del hombre más fuerte y apuesto de toda Alemania. El día que naciste había una tormenta muy fuerte y te cayó un rayo encima y eso te dio superpoderes".

Pomodoro se dio cuenta de todo el bien que podía hacer y empezó a visitar a entrenadores de héroes por todo el mundo. Uno era peor que el otro y el otro era peor que uno, así que fue fortificándose hasta que consiguió plantarle cara al fénix; él, junto con su cerdo Zacarías y la espada de la apariencia ganaron.

Kristhal Hernández 1º C Descripción de una persona

Jesús Calleja es un hombre inteligente, divertido, pacífico, valiente y un poco vanidoso. No es un hombre violento, se podría decir que es un hombre afable pero de vez en cuando es adusto, si en ocasiones se le ve apacible es signo de que está cansado dado que es un hombre que la energía le reboza el cuerpo; es extrovertido, pero depende de que tipo de gente sea puede ser también introvertido o esquivo, este último suele serlo menos dado que al estar en un programa de televisión le conocen en varios sitios, esto normalmente le convierte en una persona arrogante(en el mejor sentido de la palabra).

Sus rasgos físicos son peculiares dado que es de mediana estatura y atlético, su cuerpo es una máquina perfecta del deporte pero aunque él no lo diga está pasando a ser mayor; en su pelo se le empiezan a notar mechas blancas que no se asemejan al cabello rubio, rizado y fino que tenía hace cinco años. Sus ojos son pequeños y de color; sus dientes son blancos  y firmes aunque irregulares en la colocación de los colmillos, estos están así porque su padre no le pudo poner los aparatos dentales en los dientes. Sus cejas son arqueadas y castaño claro, tienen una separación de longitud normal pero en la ceja izquierda tiene un abultamiento de pelo que según él es una herencia de familia por parte de madre, toda su familia tenía el mismo bulto pero cambia el lado y la ceja en el que se encuentra. Sus mejillas son pálidas e hinchadas y se le suelen enrojecer por el frío tan extremo que hay en las montañas como el Everest( ha escalado varios picos de los cuales el Everest es uno de los más altos). Su cuello es corto y grueso. Sus piernas son delgadas aunque son robustas con una musculatura bien formada de todo el deporte que practica.Tiene las manos blancas y rugosas, y según la gente que se las ha tocado  da una sensación de calidez y sensatez que dicen mucho de Jesús. Su indumentaria suele ser llamativa, esto es así por si algún día se pierde en la nieve, en la selva... le puedan localizar si le buscan o como señal para que un helicóptero le divise o un avión le rescate o le de la señas de alarma que hay alguien perdido. Normalmente va con una chaqueta llamativa y unos pantalones negros o de un color claro, aunque no se pude decir que su ropa es lujosa o que es desaliñada o pobre, tampoco descolorida ni rota.

Kristhal Vanessa Hernández Ocando 1ºC Autobiografía

 Nací en Caracas el dieciséis de diciembre de mil novecientos noventa y nueve. Cuando tenía dos años y medio vine con mi familia a Canarias, Tenerife. No recuerdo gran parte de mi infancia dado que era una niña bastante olvidadiza, mi recuerdo más temprano es de cuando tenía cinco años, mi profesor Nieves me decía que yo iba a ser una gran coqueta y muy inteligente [...].

Un año después mi abuelo y mi abuela vinieron a Tenerife para ver a mi madre pero ese viaje no es uno de los mejores, dado que mi abuelo se murió en el hospital de La Candelaria porque se atragantó con la dentadura y no pudieron volver a sacársela [...].

Toda esa etapa de mi vida no la recuerdo, ¿por qué?, no sé, pero lo que sí recuerdo es a partir de cuando tenía ocho años, que empecé a ir a clases de pintura, no se me daba nada mal, mi profesora decía que yo iba a ser la próxima "Giorgione".

Pasaron dos años hasta que fui a un campamento de verano de balonmano y mi primera impresión fue que no me gustaba y que no jugaría nunca porque decía que era un deporte de estúpidos y dos años después me apunté al equipo de balonmano de Tejina, yo estaba allí por obligación( el médico me detectó un problema en la espalda y tenía que hacer algún deporte y me recomendaron que jugara la balonmano) así pasó un año y como recompensa a todo mi esfuerzo me dejaron ir a un campeonato de Canarias y este año estoy luchando para ir otra vez. En resumen, si me hubieras preguntado hace dos años si iba a jugar al balonmano te hubiera respondido que no, pero hoy me haces la misma cuestión y te digo que el balonmano es mi vida, mi pasión y que no lo dejaría por nada del mundo.

Kristhal Vanessa Hernández Ocando 1º C

Me gusta.

   Me gusta que me despierten por las mañanas con dulzura, me gusta empezar con buen pie el día, me gusta que me digan las cosas a la cara, me gusta que sienta a alguien a mi lado, me gusta ver las películas sin publicidad, me gusta tener un bol de cotufas para mí sola, me gusta chatear con mis amigas, me gusta jugar al balonmano, me gusta que me pongan retos, me gusta que me exijan más de lo que puedo, me gusta tener a mis compañeros a mi alrededor, me gusta hacer la tarea bien, me gusta tener mucha hambre para así comer más, me gusta ver a los viejecitos en la plaza contando sus vivencias, me gusta asustar a las palomas.

No me gusta.

  

  No me gusta que la gente se ría de mí, no me gusta que me digan lo que no puedo hacer o no conseguiré, no me gusta estar entre una nube de humo por el cigarro, no me gustan los bocadillos sin tostar, no me gustan las hermanas que te dicen que por ser mayor te pueden mandar a hacer lo que ellas quieran, no me gusta tener que hacer las cosas que otros no han hecho, no me gusta montar en bicicleta, no me gusta perder un partido de balonmano y menos cuando sé que lo hemos perdido por mi culpa, no me gusta que la gente se piense que por ser las más pequeña de mi clase me pueden subestimar, no me gusta que un profesor nos mande mucha tarea, no me gusta aquellas personas que opinan que el fútbol es mejor que los demás deportes, no me gusta que me digan que por ser una chica no puedo jugar a algún deporte, no me gusta que me insulten y menos a mis espaldas.