sábado, 6 de noviembre de 2010

Édgar Perera de León 1º B Me gustan los baifos

   Esto era un niño llamado Juan. Vivía en una granja al sur de Fuerteventura. En ella vivía su padre, su madre y cuatro hermanos. Era la más grande de Fuerteventura y tenía todo tipo de animales los más abundantes eran las cabras, ovejas, vacas, gallinas, cochinos, conejos y perros. También tenían una zona para cultivar donde plantan chochos, papas, batatas y verdura. Juan tenía que ir al colegio con sus cuatro hermanos caminando dos kilómetros y cuando llovía se enchumbaban todos porque la guagua no pasaba por ahí. Mientras el padre y la madre le daban de comer a los animales, que era lo que a Juan le encantaba. En verano, que ni sus hermanos ni Juan iban a clase, se quedaban ordeñando a las vacas, cabra y ovejas para hacer queso. Un día el padre se compró un camión, eso decía que no tendrían que ir caminando más hasta el colegio y que podría traer más animales. Juan siempre se alongaba por la ventanilla del camión.

A final de año su familia sacrificaba algún animal para hacer una cena con: los quesos que tenían, lo que cultivaban en la huerta y una pelota de gofio. Aunque a Juan le gustaba la celebración le daba mucha pena porque le gustaban los baifos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nota: 5